Sonsoles Ónega opina de Esther Doña fuera de Atremedia

La carrera profesional de Sonsoles Ónega atraviesa un momento muy glorioso. Con su programa ya instalado en la agenda de la audiencia y buenas mediciones, va rumbo a cerrar un año de cambios rotundos en el que las polémicas le rozan muy de cerca.

Una de esas es la baja de Carmen Lomana que ha decidido renunciar a su puesto como colaboradora. Con la presentadora todo estaba bien, pero, según su versión, la directora del programa no le quería y por eso le ha ninguneado durante su trabajo, tanto antes, como durante el directo.

Para llenar este hueco de “Y ahora Sonsoles”, Atresmedia ha acudido a Esther Doña, quien se encontraba bastante alejada de la televisión. Pero eso sí, con un escándalo a medio transitar, después de su ruptura con el juez Santiago Pedraz, cuyas versiones todavía no están del todo zanjadas.

Ayer, la periodista que dirige el vespertino se ha pronunciado alto y claro acerca de la salida de Carmen y la llegada de Esther. No lo ha hecho en su plató, si no en el lanzamiento de la película “Sintiéndolo Mucho”, sobre la vida de Joaquín Sabina.

La comunicadora ha asistido con mucho gusto y junto a parte de su equipo a esta presentación por la que han pasado también muchos otros famosos. Tras confesarse una encantada con las letras del artista, ha dicho destacado la labor de la gente que le acompaña en Atresmedia.

En especial, a quienes han “empezado a hacer tele hace años”, pero antes del programa estaban sin lugar en la pantalla. “Lo contentos que están… Eso, yo creo que se nota en el plató. La buena química que hay entre todos…”, espetaba la madrileña.

Una reportera de Europa Press le consulta por el arribo de Esther Doña y la periodista se manifiesta muy conforme. “Esther se ha incorporado con muchas ganas de remar, y yo, todo el que reme por este programa, bienvenido va a ser”, explicaba.

A su vez, Sonsoles Ónega, ha dejado en claro que Lomana se ha ido por su cuenta. “Ha tomado esa decisión y está bien, nosotros respetamos todo”, decía para desprenderse de la polémica.